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viernes, 8 de abril de 2011

"PRIMAVERA CANALLA"

En una de esas semanas primaverales en las que uno deja la vida pasar alegrándose del sutil pero progresivo desnudo virtual de unas féminas que buscan la comodidad con el calor de ciertas tardes de terraza, cerveza y cigarrito, un servidor se aísla del mundo en su destartalado cuarto para disfrutar de nuevo de la escritura de este blog que, al igual que los futbolistas, se puso una jornada de huelga.
En mi caso cumplí con ese objetivo probablemente influenciado por la parte más sindicalista de las pocas neuronas que me quedan por quemar.

Y como podrán entender entiendo que en este tiempo sin hablarnos las cosas cambien de contexto devoradas por la cantidad de información exterior e interior que circula en los medios de comunicación en lo que lo único importante es ser noticia.

Lo que ayer era verdad hoy es mentira

Pero es primavera en el Corte Ingles y por tanto nos olvidaremos del índice de paro en un país en el que se anuncia la renuncia de un líder devorado por los acontecimientos del peso de un poder que desgasta, ignoraremos la cantidad de agua radiactiva vertida en las costas de un Pacífico tan asustado como los habitantes de Ciudad del Cabo o, incluso, nos quejaremos de la subida del tipo de interés anunciado por el banco central europeo para frenar la inflación de una crisis que obliga a ciertos estados miembros a pedir rescates que no pueden pagar.

Algo huele a podrido en algún lado decía un dramaturgo ingles.

Pero a pesar de todos los males que nos hacen sentirnos estables dentro de la gravedad, de vez en cuando los pequeños milagros nos hacen volver a creer en algo más o menos tangible.

Ignoro si el sistema planetario influye en las mareas, si las energías condicionan el futuro individual o colectivo de la sociedad en la que nos desenvolvemos y si el contexto temporal y geográfico altera la resolución final de los acontecimientos.
No lo sé.

Pero de vez en cuando, y solo de vez en cuando, David vence a Goliat.

Y es que si por algo se distingue el ser humano es por esa rara paranoia mental que nos hace, al creérnoslo, ser más fuertes y que tiene mucho más que ver con el dogma de la esperanza que con cualquier clase absurda de pronóstico predestinado dentro de una realidad entre comillas, lógica.

Pero todo lo que a priori esta dotado de razón intelectual, dialéctica y argumentativa sigue estando expuesta a los hechos finales para certificar el fin que no el final.

Y el sábado, a eso de las ocho de la tarde saltó la sorpresa en el Bernabeu.

Dicen los mayores, esos hombres sabios que saben más por viejos que por diablos, que el tiempo pone a cada uno en su lugar.
Y no se pudo encontrar mejor emplazamiento para finiquitar las posibles dudas hacia un colectivo del que alguien, en un momento determinado, sugirió su dejadez en partidos complicados dudando de la profesionalidad de unos jugadores que ni ahora son el Leverkusen ni antes eran la última mierda que cago Pilatos.

Polémica por tanto zanjada con cura de humildad de por medio.

Jornada treinta.

El Getafe y la Real se complican la existencia al entrar en ese grupo peligroso que nos mantendrá en vilo hasta final de temporada.
Cambió de actitud en un Hércules que sigue creyendo en el milagro de la permanencia como lo hace un Depor que sigue remando para ello.
El Athletic se aposenta en Europa sin hacer ruido obligando que Sevilla y Atlético cumplan con sus respectivos compromisos bajo la mirada atenta de un Espanyol que pierde fuelle.
Golpe de mano de un sorprendente Levante ante un rival directo del que a día de hoy se ignora de quien es la culpa y que observa en silencio y asustado las victorias a domicilio de sus enemigos íntimos.
Un Barcelona resolutivo saca petróleo en Villareal certificando prácticamente el Campeonato a ritmo de Shakira y pendiente de las evoluciones de un siete estancado con el gol.
Preciado asalta el Bernabeu por segunda vez en su carrera y el Sporting (ojo al dato) por cuarta vez en su historia despojando al equipo de Chamartín del título liguero salvo hecatombe histórica en la ciudad Condal.

Mención especial para el Almería mostrando desde estas líneas un apoyo total en esta complicadísima misión casi imposible que no insalvable.
Muchísima suerte compañeros.

Y de momento nada más.

O quizás si.

Como todo parece indicar que tendremos clásico en semifinales de la Champions, os aviso en primicia de un post especial dedicado a tal acontecimiento.

Podéis ir en paz.

1 comentario:

  1. Muchísimas gracias por lo del Almería, de verdad.

    Saludos desde La Escuadra de Mago
    Por cierto, si puedes, métete en mi blog que tengo una gran sorpresa...^^

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